Como persona que practica la oración, disfruto el leer el versículo en Santiago 5.16 según me recuerda que las oraciones de una persona justa pueden ser poderosas y efectivas.
Piense en la oración de Ignacio, llamado así por Ignacio de Loyola (1941-1556) como un tipo de experiencia virtual de la Escritura donde lee la Palabra y después crea en su mente una breve película sobre lo que lee...